TEJEDORES DE PALMA
Tlamacazapa, pueblo Nahuatl ubicado en el municipio de Taxco de Alarcón, Guerrero es el hogar de cientos de tejedores de palma. El movimiento de sus manos al trenzar la palma es el legado de una tradición milenaria que se ha preservado gracias a la enseñanza de generación en generación. Esta practica artesanal es el sustento de cientos de familias, al apoyarlos, no solamente contribuimos a preservar esta tradición, sino también promovemos el desarrollo económico de la comunidad.
TEJEDORAS DE PALMA
Tlamacazapa, pueblo Nahuatl ubicado en el municipio de Taxco de Alarcón, Guerrero es el hogar de cientos de tejedores de palma. El movimiento de sus manos al trenzar la palma es el legado de una tradición milenaria que se ha preservado gracias a la enseñanza de generación en generación. Esta practica artesanal es el sustento de cientos de familias, al apoyarlos, no solamente contribuimos a preservar esta tradición, sino también promovemos el desarrollo económico de la comunidad.
Cesar
(40 años) Cesar lleva más de 11 años colaborando con AC Palma. Su mamá es quien le enseñó a tejer la palma desde que era un niño. Para Cesar, AC Palma representa el “beneficio para el sustento de su familia.”
Catalina
(39 años) Catalina lleva toda su vida en la comunidad de Tlamacazapa, Guerrero. Desde niña, instruida por sus padres, Catalina aprendió a tejer la palma. Lleva 11 años colaborando con AC Palma.
Oliva
(90 años) Doña Oliva lleva desde los 9 años tejiendo la palma. AC Palma es “el lugar que nos da trabajo para que no falte comida en la casa.”
Sergio
(30 años) Sergio aprendió a tejer la palma observando a sus papás. Lleva casi 2 años colaborando para AC Palma. Cuando no está tejiendo juega al basquetbol o dibuja. AC Palma es “nuestra fuente de ingreso, mi trabajo seguro, mi forma de vida, mi apoyo para salir adelante. Seguir avanzando como persona y como artesanos, ir descubriendo que tan capaces somos de realizar nuevos diseños.”
Mercedes
(22 años) Meche aprendió a tejer la palma a los 8 años con ayuda de sus padres. “Para mí AC Palma es una empresa donde puedo crecer, progresar como artesana y persona, la empresa es de mucho apoyo para tener algo en nuestra mesa día con día.”
Familia Chaves
Alejandrina, Marisol y Alma son hijas de uno de los grandes maestros artesanos de la región Miguel Chaves. Fue él y su mamá, Elena, quienes les enseñaron a sus hijas a tejer desde temprana edad. Llevan más de 9 años colaborando con AC Palma.
Víctor †
(58 años) Víctor, QEPD, aprendió a tejer la palma solo, a sus 8 años. Además de tejer la palma, disfruta mucho escuchar música. Lleva casi 4 años colaborando con AC Palma.
Cristina
Diana nos cuenta que “el tejido de palma se aprende aquí en el pueblo [Tlamacazapa] desde muy pequeña… a todos nos enseñan a tejer desde muy chicos.” Cheli, Juan Pablo y Otto, hermanos de Diana, colaboran con AC Palma desde hace ya varios años.
Sara
Aprendió a tejer la palma a los 8 años. Tiene 8 hijos.
Diana
Su papá le enseño a tejer la palma a los 14 años. Lo que más le gusta tejer son los tortilleros y la botella buró.
Luz
Desde pequeña teje la palma, aprendió al ver a sus familiares tejer.
Clara
Le enseñó a su hija desde chico a tejer la palma. Es madre soltera.
Cesar Castro Ochoa
(40 años) Cesar lleva más de 11 años colaborando con AC Palma. Su mamá es quien le enseñó a tejer la palma desde que era un niño. Para Cesar, AC Palma representa el “beneficio para el sustento de su familia.”
Catalina Pajita Rivera
(39 años) Catalina lleva toda su vida en la comunidad de Tlamacazapa, Guerrero. Desde niña, instruida por sus padres, Catalina aprendió a tejer la palma. Lleva 11 años colaborando con AC Palma.
Oliva Álvares Gonzalez
(90 años) Doña Oliva lleva desde los 9 años tejiendo la palma. AC Palma es “el lugar que nos da trabajo para que no falte comida en la casa.”
Sergio Rivera Chávez
(30 años) Sergio aprendió a tejer la palma observando a sus papás. Lleva casi 2 años colaborando para AC Palma. Cuando no está tejiendo juega al basquetbol o dibuja. AC Palma es “nuestra fuente de ingreso, mi trabajo seguro, mi forma de vida, mi apoyo para salir adelante. Seguir avanzando como persona y como artesanos, ir descubriendo que tan capaces somos de realizar nuevos diseños.”
Mercedes Castro Pajita
(22 años) Meche aprendió a tejer la palma a los 8 años con ayuda de sus padres. “Para mí AC Palma es una empresa donde puedo crecer, progresar como artesana y persona, la empresa es de mucho apoyo para tener algo en nuestra mesa día con día.”
Familia Chaves Rivera
Alejandrina, Marisol y Alma son hijas de uno de los grandes maestros artesanos de la región Miguel Chaves. Fue él y su mamá, Elena, quienes les enseñaron a sus hijas a tejer desde temprana edad. Llevan más de 9 años colaborando con AC Palma.
Víctor Rivera Villa
(58 años) Víctor aprendió a tejer la palma solo, a sus 8 años. Además de tejer la palma, disfruta mucho escuchar música. Lleva casi 4 años colaborando con AC Palma.
Diana Zacarías
Diana nos cuenta que “el tejido de palma se aprende aquí en el pueblo [Tlamacazapa] desde muy pequeña… a todos nos enseñan a tejer desde muy chicos.” Cheli, Juan Pablo y Otto, hermanos de Diana, colaboran con AC Palma desde hace ya varios años.
Sara Uribe
Aprendió a tejer la palma a los 8 años. Tiene 8 hijos.
Cristina Castro
Su papá le enseño a tejer la palma a los 14 años. Lo que más le gusta tejer son los tortilleros y la botella buró.
Luz Barrera Rivera
Desde pequeña teje la palma, aprendió al ver a sus familiares tejer.
Clara
Le enseñó a su hija desde chico a tejer la palma. Es madre soltera.